* Nacido en esta comunidad, ni bien concluyó sus estudios universitarios retornó a esta para radicarse definitivamente y ejercer su profesión.
* Conoció la propuesta de Mauricio Macri cuando, la misma apenas se estaba gestando en el partido denominado «Compromiso para el cambio».
* Elegido concejal, desde su banca trabajó con absoluta seriedad, generando proyectos de interés para la comunidad.
* En las últimas elecciones de octubre, el voto popular lo consagró intendente municipal del Partido de 9 de Julio.
El próximo 10 de diciembre, Mariano Edmundo Barroso, asumirá como intendente municipal del Partido de 9 de Julio. Una nueva página se abre en la historia política de 9 de Julio pues, de su mano, después de varias décadas, el Pro, un partido que no era tradicional, estando hace poco más de 10 años, liderará los destinos políticos del distrito.
Con una alta adhesión popular, demostrada en las urnas, Mariano inicia una gestión que, para un importante sector de la sociedad, se avizora esperan- zadora y de grandes cambios en el modo de concebir la administración municipal.
Mariano conoce de cerca los diferentes mecanismos que conforman la maquinaria de la gestión. Desde el Concejo Deliberante desarrolló una impecable labor, con un fuerte compromiso para con la sociedad, no solamente en la elaboración de los proyectos, sino también en el contralor del ejercicio.
Su historia de vida representa la trayectoria de un joven que, impregnado por nobles ideales, se ha lanzado a la carrera política con honestidad y transparencia.
SU TRAYECTORIA
Nacido en 9 de Julio el 9 de diciembre de 1976, Mariano es hijo de Rubén Omar Barroso (destacado médico pediatra) y la docente Ana María Benedetti. En efecto, es el quinto de seis hermanos: Ignacio, Fernando, María Rita, Ana Inés y Gastón.
Su infancia y adolescencia transcurrieron en esta ciudad. En su hogar paterno de la avenida Vedia entre Tucumán y Cardenal Pironio, vivió los días felices de su niñez, forjando una gran amistad con la barra de amigos de su barrio, jugando en la vereda de su casa o en la de Marcos Oliverio o de Jorge Casal. El Jardín de Infantes y la educación primaria la cursó en el Colegio Jesús Sacramentado, mientras que los estudios secundarios en el Colegio Marianista San Agustín, donde egresó en 1994.
«Tuve -recuerda, en diálogo con EL 9 DE JULIO- una infancia muy feliz. Con mis hermanos, nos une también una relación de amistad, eso se lo debemos a nuestros padres. Esa compañía de padres y hermanos ha sido, en mi vida, un factor muy importante».
La influencia de sus abuelos ha sido clave en su formación: sus abuelos maternos, Edmundo y Elsa Benedetti; y los paternos, Federico y Natalia. La figura de su abuelo Edmundo está ligada a los más entrañables recuerdos. Pionero de la oftalmología en este ciudad, fue ante todo un hombre de sólida formación intelectual que, como eximio pianista que fue, le enseñó a cultivar la música.
SU CARRERA
Cursó la carrera de Ciencias Económicas en la Universidad de Buenos Aires. En la Capital Federal ya vivían sus hermanos mayores, Ignacio que culminaba su residencia médica; Fernando, quien también comenzaba su residencia profesional y una de sus hermanas que cursaba la carrera de ingeniería agronómica.
Cuando aún se encontraba estudiando, comenzó a trabajar en el sector contable de una empresa de viajes y turismo hasta que obtuvo el título de Contador Público Nacional. Si bien, en esa empresa, le ofrecieron un importante puesto, optó por regresar a su ciudad natal donde había recibido otra propuesta laboral, de manos de Naldo Fasciolo, en la Mutual de la Creces, que dependía de la Cooperativa Eléctrica y de Servicios «Mariano Moreno».
Un año más tarde ingresó a trabajar en la firma «Alfredo César Gougy», de Graciela Gougy y Marcelo Rossi, donde estuvo trabajando hasta pocos días después de ser electo intendente municipal.
«De toda la gran felicidad que me genera haber sido elegido intendente municipal, lo que más lamento es haber tenido que renunciar a esta empresa, desvincularme profesionalmente de estos jefes que han sido excelentes. A ellos les debo muchísimo, porque fueron quienes me permitieron poder desarrollar mi carrera política, tomando días, manejando los horarios. Me llena de orgullo haber trabajado para ellos», sostiene Mariano.
LA VOCACION POLITICA
Además de los amigos que conserva de la escuela, Mariano, frecuenta un grupo llamado CAV («Club Atlético Vaudagna»), con quienes comparte una amistad desde los 17 o 18 años. Con ellos, habitualmente, en cada asado, surgía el tema de la política. Allí comenzó a desarrollar su interés por la temática, como también al escoger los libros para su lectura.
En Buenos Aires se vinculó a la fuerza política que entonces se denominaba « Compromiso para el Cambio» (creado en 2003 bajo la conducción de Mauricio Macri), merced a una invitación realizada por Juan Gabriel Gentile, cabe recordar que, aquel partido, en 2005 se fusionó con el partido «Recrear para el Crecimiento» para conformar el partido «Propuesta Republicana» (PRO).
«A partir de algunas reuniones -recuerda- a las que asistí pude conocer de qué se trataba esta nueva forma de hacer política. En ese momento íbamos a un local partidario en la avenida Santa Fe, muy pequeño, en la que participamos de reuniones con pocos asistentes, personas que se iban acercando. Recuerdo que, en una oportunidad, me tocó entregar volantes cerca de la Escuela Yrigoyen; así, de esa manera, comencé mi militancia cuando la propuesta de Mauricio se estaba gestando».
Algunos años más tarde, cuando Mariano se encontraba radicado en esta ciudad, surgió la iniciativa de generar un espacio de «Propuesta Republicana» (PRO).
SU FAMILIA
Casado, desde 2012, con María Julia Menén- dez, es padre de Catalina y Joaquín
«María Julia es un soporte permanente, gracias a ella he podido emprender esta carrera política. Mi familia es algo así como mi oasis, todo lo que hago lo hago por ellos. El tema de los afectos y de la vida familiar es una parte muy importante de mi vida, me apoyo
PALABRAS FINALES
Mariano es una persona de bien a quien le agrada, de manera especial, el valor de la amistad,
«Me gusta -afirma- conocer a la gente. Gracias a Dios, jamás he tenido problemas personales con nadie. Me gusta mucho escuchar y buscar consensos. Adoro estar en mi casa, con mi familia y sé que, a partir de la gestión municipal, eso me va a costar un poco, ya que la gestión y los compromisos públicos, demandan mucho tiempo».
Mariano se define como «un vecino de 9 de Julio, como cualquier otro, a quien la historia, la situación, el trabajo, lo ha llevado a ocupar un lugar».
«Espero estar a la altura de las circunstancias y representar de la mejor manera posible a todos los ciudadanos del Partido de 9 de Julio», concluye.